¿ADAS, DUENDES, NOMOS...?

¿ HADAS,  DUENDES, NOMOS ...?

Hace muchos años siendo una jovencita como de quince años, nos mudamos a una casa que rentamos. 

A poco tiempo de vivir ahí cada miembro de la familia escuchaba y veía cosas un poco raras. por ejemplo:  Las cortinas se abrían y cerraban en la noche cuando todos estábamos en nuestra cama descansando.  

En un cuarto dormían dos de mis hermanas en el otro mi mamá y yo. Entre cuarto y cuarto pusimos una cortina.  mirábamos como se  movían  y que pasaban gente pequeña porque se  escuchaban risas como de niños que pasaban jugando.  

Mi hermano el menor  empezó a perder el apetito y se sentía obligado a la hora de comer a dejar un poco de comida en su plato, decía que alguien le decía que le dejara un poquito.

Siempre nos gusto tener gallinas y guajolotes los que dando las doce del día llegaban hasta la cocina patinando con las patitas hacia arriba como que algo les espantara.. 

La verdad nunca sentimos miedo,  pero por las dudas nos mudamos a otra casa.

Hasta el día de hoy nos seguimos preguntado que o quienes eran aquellos pequeños seres que vivían en aquella casa.  Lo bueno de todo es que todos nos volvimos más religiosos.

LAS ERINIAS

LAS ERINIAS

¿Te has arrepentido de algo que hiciste?  ¿Te has sentido culpable y avergonzado, triste porque consideras que no te sientes con derecho a ser feliz.   Los griegos achacaban esto a las Erinias...

Las Erinias eran unos monstruos horribles que nacieron de las gotas de sangre que salpicaron la tierra cuando Cronos atacó a Urano. Su forma era la de horribles mujeres con alas parecidas a las de los murciélagos, solamente que  enormes.  En vez de cabellos les crecían serpientes venenosas,  de la cabeza y en sus pies y manos tenían unas garras enormes.  Volaban de un lado a otro armadas con látigos y antorchas que les servían para cumplir su misión.  Tenía la tarea de castigar a los malhechores y a todos aquellos mortales e inmortales que obraban mal.

Cuando se apoderaban de alguien lo enloquecían y torturaban de una manera terrible.  Aunque vivían en el Mundo de los Muertos,  podían transportarse en un instante al lugar donde estaba su víctima,  por más apartado y escondido que estuviera.
 Como no tenían entendimiento claro y eran fuerzas salvajes, disfrutaban provocando el dolor.

JULIO VERNE

JULIO VERNE


Considerado como el iniciador de la ciencia-ficción  viajó, con la imaginación, por todos los rincones de la Tierra.

En sus novelas, sus personajes viajan al centro de la Tierra, dan la vuelta al mundo en 80 días, recorren 20.000 leguas de viaje submarino y llegan a la Luna, antes de que nadie lograra hacerlo en la realidad.

Sin embargo, este genial escritor jamás se alejó de Amiens (Francia), donde vivió cuarenta años, y su único viaje en barca, por el río Sena, lo mareó tanto que hubo que llamar a un médico para que lo asistiera.

SAN ANTONIO EL FUEGO Y LOS HOMBRES

SAN ANTONIO EL FUEGO Y LOS HOMBRES.

Hubo un tiempo en el que no había fuego en el mundo. Los hombres se morían de frío iy fueron a pedir ayuda a san Antonio. Le dijeron que no aguantaban más; si no se ponía remedio acabarían congelados.

San Antonio se compadeció y a pesar de que el fuego estaba en el infierno, decidió ir a buscarlo.

Se presentó ante las puertas del infierno con su bastón y su cerdito, pues antes de ser santo, San Antonio había sido porquero.

-¡abran la puerta! - gritó golpeando con su bastón-.

¡Tengo frío y me quiero calentar!

Los diablillos abrieron un poquito la puerta, pero sólo dejaron pasar al cerdo, que entró de un salto en el infierno.

El travieso animal se puso a corretear y a meter el hocico en todos los rincones.

Cansados de perseguirlo, los diablillos acabaron por ir a hablar con el santo.

- ¡Ese  maldito cerdo no nos deja tranquilos! ¡ven a buscarlo y llévatelo!   San Antonio entro al infierno,  tocó al cerdo con su bastón y éste se quedó quieto.

-Ya que me han hecho entrar, me sentaré un ratito para calentarme -dijo San Antonio.

Se sentó en una bolsa de corcho, acercando las manos al fuego.  De vez e cuando pasaba cerca de él un diablo a toda carrera que iba a contarle a Lucifer los pecados que en el mundo cometían las almas.  Y San Antonio,  ¡pum!, le daba un golpe con su bastón.

-No nos gustan ese tipo de bromas  -advirtieron los diablos-.   Ten cuidado con el bastón.

San Antonio inclinó el bastón, clavando la punta en el suelo y un diablillo que pasaba corriendo tropezó  y cayo rodando. 

- ¡Ya está bien! ¡Nos tienes hartos con el maldito bastón!  -gritaron los diablos.  Y le quitaron el bastón para tirarlo al fuego.  Pero en cuanto la punta tocó las llamas, el cerdo comenzó de nuevo a revolverlo todo levantando nubes y nubes de polvo.

-- Sí queréis que se esté quieto  -dijo San Antonio-, devolverme el bastón.

Los diablos se lo devolvieron sin darse cuenta de que punta ya había comenzado arder.

San Antonio no dijo nada y, tomando su bastón por el mango, se fue.

Apenas salió al aire libre, San Antonio levantó su bastón con la punta encendida y, agitándolo como una bendición, hizo que el viento esparciera las chispas que salían disparadas. Mientras tanto se puso a cantar: ¡Fuego y fuego, ahora y siempre, para todo el mundo fuego alegre!.

Y desde entonces, para la felicidad de los hombres, hubo fuego en el mundo.   

(cuento popular italiano)

ANDROCLES Y EL LEÓN

ANDROCLES Y EL LEÓN

Cuenta una vieja leyenda que, en cierta ocasión, un esclavo de Roma llamado Androcles huyó y logró llegar hasta África.

Allí se refugió en la selva, donde se tropezó con un león que gruñía y gemía lastimeramente. Androcles se echó a temblar de espanto, pues aunque los leones nunca atacan a los hombres si no se los molesta, aquél  parecía herido en una pata, y un león herido es muy peligroso.

Paralizado por el miedo, el joven esclavo miraba fijamente a la fiera, que andaba muy despacio, cojeando.  Tenía una astilla clavada en una pata, según vio Androcles, y debía hacerle mucho daño por los gemidos que profería el animal. 

Con mucho cuidado, Androcles se acercó al león y le arrancó la astilla de la pata, y luego se la vendó con un trozo de su túnica.  La fiera, comprendiendo que el hombre quería curarle, le dejo hacer sin oponer resistencia y luego se marchó, cojeando aún  pero aliviado de su dolor.

Tiempo después, Androcles fue capturado por una patrulla de soldados romanos y conducido de nuevo a Roma.  En el barco que le llevaba de regreso a Italia, encadenado, Androcles pensaba con tristeza en el castigo que le esperaba por haber huido.

Pero la realidad resultó peor aún que sus más sombríos pensamientos, pues para escarmiento de los numerosos esclavos que intentaban huir, Androcles fue condenado a morir en el circo de roma.   Eran tiempos crueles, en los que os romanos disfrutaban viendo luchar a los gladiadores contra fieras salvajes capturadas en África.

Androcles fue dejado solo en medio  de la pista del Coliseo, el  gran circo romano, donde soolt aron un león furioso y hambriento para que lo devorara.

Pero, para sorpresa de todos, la terrible fiera llegó junto a Androcles y le lamió las manos tan mansamente como si se tratara de un perrillo: era el mismo león al que el esclavo había curado tiempo atrás, que había sido capturado también y que no  había olvidado a su benefactor.

Ante suceso tan extraordinario, los romanos dejaron en libertad a Androcles y devolvieron el león a África.

UN ANILLO MÁGICO

EL ANILLO MÁGICO

Cuentan que el rey Salomón, famoso por su sabiduría, llevaba un anillo mágico que le permitía entender el lenguaje de los animales y conversar con ellos.

Konrad Lorenz, famoso científico dedicado al estudio de la conducta de los animales (Etología) ganó el premio Nobel  en 1973,  Escribió un interesante libro titulado "Hablaba con las bestias, los peces y los pájaros,  título que es una cita de la Biblia que se refiere a la leyenda del anillo de Salomón.

Konrad Lorenz en el libro antes citado cuenta el caso realmente extraordinario de un animal que llegó a usar un palabra humana con la intención de decir algo concreto; cuenta el caso de un cuervo que gritaba Roa (así se llamaba el cuervo) con esa palabra llamaba a  Lorenz cuando suponía que se encontraba en peligro. .   

SANTA CECILIA VIRGEN, SANTA Y MÁRTIR

SANTA CECILIA PATRONA DE LOS MUSICOS

A pesar de ser una de las santas más populares de todos los tiempos, es muy poco lo que se conoce sobre ella.  Se cree que nació en Roma, en el seno de una ilustre familia, y que fue casada contra su voluntad con un joven pagano llamado Valerio.

Cecilia logró que su marido respetara su virginidad y se convirtiera al cristianismo.  

Valerio fue bautizado por el Papa Urbano y junto con su hermano Tiburcio, también convertido, dio sepultura a los mártires de la persecución de Turco Almaquio.  Denunciados por esta práctica, ambos hermanos fueron decapitados.

Cecilia fue también denunciada y condenada a ser arrojada al fuego de las  termas de su propia casa, pero salió ilesa.

Turco Almaquio ordenó que fuese degollada. Cecilia, herida tres veces con el hacha, expiró  tras tres días de agonía. 

El Papa Urbano, ayudado por sus diáconos, enterró a la mártir y consagró su casa como basílica.

El culto a Santa Cecilia se difundió ampliamente a causa del relato de su martirio, que la ensalza como ejemplo de la mujer cristiana.   Una frase del acta de su martirio según la cual cantó durante su tormento, le valió ser patrona de los músicos.  Las agrupaciones musicales, coros y orquestas la celebran como patrona el 22 de noviembre.